El hidrociclón es un equipo de separación líquido-líquido comúnmente utilizado en yacimientos petrolíferos. Se utiliza principalmente para separar partículas de petróleo libres suspendidas en líquido y cumplir con las normas de emisiones exigidas por la normativa. Aprovecha la fuerte fuerza centrífuga generada por la caída de presión para lograr un efecto de remolino de alta velocidad en el líquido dentro del tubo ciclónico, separando así centrífugamente las partículas de petróleo con menor gravedad específica para lograr la separación líquido-líquido. Los hidrociclones se utilizan ampliamente en la industria petrolera, química, de protección ambiental y otros sectores. Pueden manejar eficientemente diversos líquidos con diferente gravedad específica, mejorar la eficiencia de la producción y reducir las emisiones contaminantes.